El clásico pollo frito con el delicioso sabor de lo mejor de nuestra comida rápida. No gastes más y #QuédateEnCasa sin perdértelo. Créenos, los niños te amarán mucho más de lo que ya lo hacen luego de que les prepares esta receta.
Lo sabemos, lo divertido de ir al restaurante de pollo frito es que no lo preparas, los utencilios para comer son desechables y el pollo está servido mientras pagas la orden. Lo llevas a la mesa, comes y te despreocupas, pero justo ahora estamos en tiempos en los que estos restaurantes están en su mayoría cerrados y debemos ahorrar cada monedita que tengamos pensando en la economía familiar. Por eso te enseñamos a preparar el más rico pollo frito que te va a encantar. La receta es súper sencilla y rápida de hacer. Además puedes jugar al restaurante de comida rápida en la casa.
Receta del pollo frito
Datos de la receta
- Tipo: almuerzo
- Cocina: Casera, basada en comida rápida
- Rendimiento: 12 piezas aprox.
- Calorías: 1 pieza – 300 calorías aprox.
- Tiempo de preparación: 1 hora
- Tiempo de cocción: 30 minutos
- Tiempo total: 1 hora y 30 minutos
Ingredientes
- 1 pollo pequeño de 2 kg. aprox.
- 6 dientes de ajo
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
- Orégano en polvo al gusto.
- 2 tazas de harina de trigo
- 1 taza de agua
- 2 cdtas. de polvo para hornear

Modo de preparación del pollo frito
Para preparar un deliciosos pollo frito lo primero que debemos hacer es descongelar el pollo y lo cortamos en piezas tomando las más importantes: muslos con cuadril, alas y parte de las pechugas, procurando dejar algo de la piel aunque retirando el exceso de grasas. El pescuezo y el resto del carapacho, lo vamos a reservar para otra receta como un caldo para Ramen instantáneo o una sopita levanta muertos.
Ahora, separamos los muslos del cuadril, las chupetas y la parte intermedia de las alas, la pechuga y las deshuesamos, aunque también se vale comprar directamente pollo deshuesado, teniendo en cuenta que es un poquito más costoso. Las pechugas las cortamos en óvalos 1,5 cm de grosor y de 4 a 5 cm de diámetro, pensando en el tamaño de los nuggets. Con el resto de piezas, simplemente con deshuesarlas ellas se dividen en dos, pero si alguna queda muy grande siempre podemos picarlas nosotros mismos. Con las piezas separadas y picadas, reservamos, pero no a la nevera, queremos el pollo a temperatura ambiente.
Mientras tanto vamos a preparar la harina. Colocamos las dos tazas en un recipiente, agregamos el polvo para hornear, dos cucharaditas de sal, pimienta al gusto (para los niños pequeños es mejor sin pimienta), un toque de orégano en polvo y mezclamos en seco. Con esto habremos preparado una harina especial para freír.
La mezcla anterior no necesita más nada a menos que, a tu gusto, quieras agregarle una pizca de especias en polvo. No obstante, desde ya te decimos que no es necesario tener los 11 ingredientes secretos del coronel.
Dividimos la harina en dos, la mitad la sacamos en una taza y la otra mitad la dejamos en el recipiente. Luego, a la harina del bol le vamos agregando la taza de agua poco a poco mientras mezclamos con un tenedor. Así vamos a conseguir una mezcla sencilla y con la consistencia adecuadamente suave, más una taza de harina preparada en seco.
Seguidamente continuamos con los ajos, procuremos trabajar con dientes grandes. Toca pelarlos y picarlos en cuadritos muy finos, aunque también podemos usar una cucharadita de ajo en polvo.
Depositamos el pollo en un recipiente, eliminamos el exceso de agua y sangre, le colocamos una pizca de sal, otra de pimienta y una de orégano en polvo -puedes evitar la pimienta o el orégano, aquí solo usamos orégano y quedó BRUTAL- y los mezclamos con el ajo que acabamos de picar.
Ponemos a hervir el aceite en un caldero mediano, aproximadamente 600ml dependiendo del tamaño de tu caldero, lo recomendable es que no pase del 60% de la capacidad del mismo.
Mientras el aceite hierve, tomamos el pollo así como está. Y lo colocamos en el microondas por 30 segundos, lo sacamos, removemos con una cuchara para que se caliente firmemente y lo colocamos 30 segundos más en el microondas con el objetivo de que se caliente lo suficiente (este tip es súper importante) para que no quede mal cocido después de frito.
Luego, tomamos el pollo atemperado y vertimos la mitad en el recipiente con la mezcla de harina preparada previamente con agua. Mezclamos muy bien y dejamos macerar a temperatura ambiente. Mientras, vamos a tomar una caja plástica mediana, agregamos parte de la taza de harina preparada que nos quedó aparte, colocamos las piezas de pollo cubiertas con la mezcla, las bañamos con un poco de harina, cerramos la caja y las sacudimos fuertemente. Parecen muchas cosas, pero se hace en un momentico.
Este último procedimiento lo haremos hasta que tengamos todas las piecitas de pollo listas para freir. Con el aceite hirviendo freímos el pollo hasta que este doradito. Sacamos a un escurridor y ¡voilá!
¡Buen provecho!

Esta misma receta nos sirve para el pollo frito BBQ coreano, pero en lugar de las especies y salsas asiáticas podemos colocar simplemente dos cucharadas de ketchup, dos de salsa BBQ y un toque de salsa picante en una sartén y una vez con los piecitas de pollo fritas en la mezcla y la harina, las salteamos en esta salsa.
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